La reciente publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) de la orden ministerial que desarrolla la Ley Antifraude ha traído importantes novedades para empresas y autónomos de todos los sectores, incluyendo el pesquero. Con esta nueva regulación, la facturación electrónica se convierte en una obligación que no solo afecta a la forma en que gestionamos nuestras operaciones comerciales, sino que establece exigencias técnicas para los programas de facturación.

En este artículo te explicamos cómo afecta esta normativa a las empresas pesqueras, mayoristas y cofradías, cuáles son los requisitos de los nuevos sistemas de facturación y cómo cumplir con la ley de forma sencilla y segura.

¿Qué es la Ley Antifraude y por qué afecta al sector pesquero?

La Ley 11/2021 de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal, popularmente conocida como Ley Antifraude, busca reforzar la transparencia y combatir la evasión fiscal en España mediante la adopción de sistemas de facturación electrónicos. La normativa establece que todas las empresas y autónomos deben usar software certificado de facturación que cumpla con estrictos criterios de inalterabilidad, trazabilidad y conservación de los registros.

Para el sector pesquero, esto significa que tanto las cofradías de pescadores como los mayoristas y minoristas de pescado y otros negocios relacionados deberán adaptar sus sistemas de facturación para cumplir con la normativa, que prohíbe cualquier programa que permita modificaciones en las facturas emitidas. Esta nueva legislación aporta transparencia y seguridad, pero también implica la necesidad de actualizar los sistemas tecnológicos.

¿Cuáles son los requisitos de los programas de facturación?

La orden ministerial establece varios requisitos técnicos que los programas de facturación deben cumplir para considerarse legales y evitar sanciones. Estos son algunos de los aspectos clave que deben tener en cuenta las empresas del sector pesquero:

Los programas de facturación deben garantizar que los registros no puedan ser alterados una vez emitidos. Esto significa que, tras la generación de la factura, ningún usuario ni sistema podrá modificar los datos almacenados, asegurando así la integridad de cada operación.

El sistema debe permitir seguir el rastro de cada factura desde su creación hasta el momento actual, de forma que cada registro esté vinculado con los anteriores. Este requisito garantiza que se pueda realizar una auditoría completa del proceso de facturación.

Cada factura deberá incluir una huella de seguridad única que la vincule con las anteriores, de modo que cualquier alteración genere un cambio detectable en la huella. Este sistema de hash permite identificar posibles manipulaciones.

La normativa exige que los programas de facturación registren automáticamente todas las interacciones con el sistema, desde su inicio hasta el final de cada operación. Este registro de eventos facilita una revisión completa de las acciones realizadas.

En algunos casos, se requerirá una firma electrónica que confirme la autenticidad de los datos. Sin embargo, la firma no es obligatoria para aquellas empresas que opten por remitir sus facturas de forma automática a la Agencia Tributaria.

Plazos para adaptarse a la nueva normativa

La orden ministerial publicada en el BOE establece fechas específicas para que los fabricantes de software y las empresas se adapten a la normativa:

  • Fabricantes de software: tendrán hasta el 29 de julio de 2025 para actualizar sus programas de facturación y cumplir con las condiciones de la ley.
  • Empresas y autónomos: deberán implementar los sistemas de facturación electrónicos antes del 1 de julio de 2025 para evitar sanciones, aunque se espera una posible extensión del plazo hasta finales de 2025 o principios de 2026.

¿Qué pasa si no cumplo con la normativa?

Las empresas y autónomos que no adopten programas de facturación certificados se exponen a sanciones económicas. Según la normativa, las multas pueden llegar hasta 50.000 euros por cada ejercicio fiscal en el que la empresa no cumpla con los requisitos de inalterabilidad y trazabilidad. Para el sector pesquero, estas sanciones representan un riesgo que puede evitarse mediante una adaptación a tiempo.

Sistema VeriFactu: una opción para facilitar el cumplimiento de la Ley Antifraude

Para facilitar el cumplimiento de la Ley Antifraude, la Agencia Tributaria ha desarrollado el sistema VeriFactu, una plataforma de envío automático de facturas que emplea tecnología blockchain para garantizar la integridad de los registros. Aunque su uso es opcional, VeriFactu permite a las empresas del sector pesquero gestionar sus registros de forma más sencilla y con una garantía de seguridad adicional.

Ventajas del sistema VeriFactu:

  • Automatización del proceso de facturación: La plataforma permite enviar los registros de facturación automáticamente a Hacienda.
  • Seguridad y transparencia: VeriFactu asegura la inalterabilidad y trazabilidad de cada factura mediante blockchain, evitando manipulaciones o alteraciones.
  • Facilita auditorías: Al centralizar los datos, este sistema permite gestionar las facturas y responder a posibles auditorías de forma ágil.

Grupo CIE: Tu partner para cumplir con la Ley Antifraude en el sector pesquero

En Grupo CIE entendemos los desafíos y oportunidades que trae la Ley Antifraude para el sector pesquero. Por eso, hemos desarrollado soluciones de facturación electrónica certificadas y adaptadas específicamente a las necesidades de las cofradías, mayoristas y minoristas de pescado y otros negocios pesqueros.

No dejes la adaptación para el último momento y evita sanciones que podrían poner en riesgo tu negocio. Con nuestras soluciones digitales, no solo cumples con la ley, sino que optimizas tus procesos de facturación de forma segura y eficiente. Contacta hoy con nuestro equipo de expertos en transformación digital para el sector pesquero y asegura una transición sin contratiempos.